Uno de los rincones desconocidos del municipio de Cudillero y que poca gente conoce es la Garita de Punta Borona, punto de vigilancia de la Costa Asturiana durante la Guerra Civil. Se comunicaba con señales luminosas con otra situada en El Costazón (Ballota) y, probablemente, con otra situada en los alrededores de Oviñana.
Las impresionantes vistas que desde ella podemos contemplar de la costa occidental del municipio de Cudillero son increíbles.
La rodean importantes acantilados: a la derecha los que dan forma a la playa de Pumarín y a la izquierda los que rodean a la playa de Ribera L’Ouca.
Se denomina Borona tanto a la punta como a la peña separada solo unos metros de la montaña, la cual posee numerosos agujeros por donde entra el mar formándose pequeños bufones. El acceso a la misma se hace por el pueblo de Santa Marina.